
Dirigida por Catherine Hardwicke, El corazón de una bestia (Red Riding Hood) es una adaptación libre del clásico cuento de Caperucita Roja. Estrenada en 2011, la película combina fantasía, romance y misterio, con una ambientación gótica que recuerda a los cuentos de hadas oscuros.
La trama se desarrolla en un pueblo medieval atemorizado por la presencia de un hombre lobo. La joven Valerie (Amanda Seyfried) se encuentra en el centro del conflicto, atrapada entre el amor que siente por el leñador Peter (Shiloh Fernandez) y el compromiso con Henry (Max Irons), mientras la bestia acecha y siembra el terror entre los habitantes.
Amanda Seyfried aporta fragilidad y fuerza al personaje principal, destacando por su expresividad. La acompañan Gary Oldman como el inquisidor implacable enviado a cazar al lobo, Virginia Madsen y Julie Christie, quienes completan un elenco que refuerza la tensión del relato con actuaciones sólidas y carismáticas.
La dirección artística apuesta por escenarios sombríos, bosques nevados y un diseño de vestuario que combina lo medieval con lo estilizado, creando una atmósfera de cuento de hadas oscuro. Los efectos visuales del lobo, aunque criticados, cumplen con acompañar el tono fantástico de la obra.
La banda sonora de Brian Reitzell aporta un tono místico y perturbador, reforzando tanto el romance como el suspenso. La música acompaña los giros de la trama y aporta intensidad a los enfrentamientos con la bestia.
El corazón de una bestia es un filme que mezcla el romance juvenil con la oscuridad del terror fantástico. Aunque fue recibida con críticas divididas, ofrece una experiencia visual atractiva y un giro adulto a un cuento clásico. Una propuesta recomendable para quienes disfrutan de los relatos góticos con toques románticos.