
Dirigida por Stephen Tolkin, Conrad y Michelle: Si las palabras mataran (Conrad & Michelle: If Words Could Kill) es un telefilme estrenado en 2018 que recrea uno de los casos más polémicos de los últimos años en Estados Unidos: el juicio contra Michelle Carter, acusada de haber instigado el suicidio de su novio Conrad Roy a través de mensajes de texto. La cinta aborda la relación entre ambos adolescentes desde una perspectiva dramática y crítica, explorando cómo la fragilidad emocional y la manipulación pueden tener consecuencias fatales.
La historia sigue a Michelle Carter (Bella Thorne) y Conrad Roy (Austin P. McKenzie), dos jóvenes que luchan contra problemas emocionales y sentimientos de vacío. A través de mensajes y llamadas, ambos construyen una relación intensa pero marcada por la dependencia y el sufrimiento. El vínculo, lejos de brindar apoyo, se convierte en una espiral destructiva que culmina en la tragedia, cuando Conrad decide quitarse la vida alentado por las palabras de Michelle.
Bella Thorne interpreta a Michelle con un enfoque que resalta la manipulación y la vulnerabilidad de su personaje, ofreciendo una actuación intensa y polémica. Austin P. McKenzie aporta sensibilidad como Conrad, reflejando su lucha interna contra la depresión y la desesperanza. Juntos transmiten la toxicidad de una relación que mezcla amor, control y dolor.
La película utiliza un estilo realista, con escenarios cotidianos que refuerzan la cercanía de la historia al espectador. El uso de mensajes de texto y llamadas como recurso narrativo subraya el papel de la tecnología en la relación y en el desenlace trágico. La atmósfera es sombría, cargada de tensión emocional y marcada por la fragilidad de sus protagonistas.
La banda sonora acompaña de manera sutil, con tonos melancólicos que reflejan el dolor y la confusión de los personajes. La música refuerza el dramatismo de la historia sin restarle protagonismo a las actuaciones y al peso del caso real que inspiró la película.
Conrad y Michelle: Si las palabras mataran es una película dura y controvertida que plantea preguntas sobre la responsabilidad, la manipulación emocional y los peligros del aislamiento juvenil en la era digital. Aunque criticada por algunos por su tratamiento sensacionalista, ofrece una mirada inquietante sobre un caso real que generó debate en todo el mundo. Una historia que invita a reflexionar sobre el poder de las palabras y la vulnerabilidad en la adolescencia.