
Dirigida por Seth Larney, 2067 se estrenó en 2020 como una propuesta de ciencia ficción que combina viajes en el tiempo, dilemas morales y un mensaje ecológico contundente. Ambientada en un futuro donde el planeta ha sido devastado por el cambio climático, la película plantea una carrera contrarreloj para salvar a la humanidad de su propia destrucción.
La historia sigue a Ethan Whyte (Kodi Smit-McPhee), un joven trabajador que vive en un mundo donde el oxígeno natural ha desaparecido y la humanidad depende de suministros artificiales controlados por corporaciones. Cuando un misterioso mensaje del futuro solicita su presencia, Ethan es enviado a través de un portal temporal hacia el año 2067, con la misión de encontrar la clave para restaurar la vida en la Tierra. Sin embargo, el viaje lo enfrentará a verdades ocultas, traiciones y al legado que la humanidad ha dejado tras de sí.
Kodi Smit-McPhee aporta sensibilidad y determinación en el rol protagónico, encarnando a un joven inexperto que debe cargar con el destino del planeta. Ryan Kwanten interpreta a Jude, su compañero de viaje, con un aire ambiguo que añade tensión a la historia. El elenco cumple con solidez, enfocándose más en el drama emocional que en la acción pura.
La película destaca por su diseño de producción y efectos visuales bien logrados a pesar de su presupuesto limitado. Los escenarios futuristas combinan tecnología avanzada con un planeta moribundo, creando una atmósfera sombría y desesperanzadora. El uso de iluminación fría y paisajes áridos refuerza el tono apocalíptico, mientras que las secuencias en el futuro aportan un aire misterioso y enigmático.
La banda sonora acompaña con un tono melancólico y reflexivo, subrayando el drama personal de Ethan y la magnitud de su misión. El ritmo es pausado, priorizando la construcción de tensión emocional y la exploración de dilemas morales por encima de la acción constante.
2067 (2020) es una película que apuesta más por las ideas y la emoción que por el espectáculo. Aunque su ritmo lento puede no ser para todos, ofrece una historia con conciencia ecológica y giros interesantes en su trama temporal. Con un protagonista convincente y un mensaje sobre la responsabilidad humana frente al planeta, se convierte en una propuesta digna dentro de la ciencia ficción independiente.