
Dirigida por Robert Eggers, El hombre del norte (The Northman) es una épica historia vikinga que combina brutalidad, misticismo y tragedia. Protagonizada por Alexander Skarsgård, Anya Taylor-Joy y Nicole Kidman, la película se inspira en la leyenda nórdica que dio origen a Hamlet. Con una puesta en escena imponente, Eggers ofrece una experiencia cinematográfica intensa y visceral, donde la venganza se convierte en el hilo conductor de una odisea sangrienta y espiritual.
La historia sigue a Amleth (Skarsgård), un príncipe que presencia el asesinato de su padre a manos de su tío Fjölnir. Años después, convertido en un feroz guerrero vikingo, Amleth jura vengar a su padre, salvar a su madre y recuperar su reino. Su viaje lo lleva a enfrentarse no solo a sus enemigos, sino también a su propio destino, en un mundo donde los dioses, la magia y la violencia se entrelazan con la naturaleza salvaje.
Eggers vuelve a demostrar su maestría en la ambientación histórica, transportándonos a un siglo X lleno de realismo y simbolismo. Cada plano está cuidadosamente construido: desde los rituales paganos y las batallas crudas hasta los paisajes volcánicos y las visiones místicas. La fotografía de Jarin Blaschke y la banda sonora de Robin Carolan y Sébastian Gainsborough crean una atmósfera hipnótica que sumerge al espectador en una pesadilla ancestral.
Alexander Skarsgård encarna a Amleth con una fuerza física impresionante y una presencia magnética. Anya Taylor-Joy aporta misterio y astucia como Olga, una aliada clave en su búsqueda. Nicole Kidman deslumbra con un papel lleno de matices, mientras que Claes Bang ofrece un villano complejo y humano. El elenco secundario, que incluye a Ethan Hawke y Willem Dafoe, refuerza la dimensión ritual y simbólica del relato.
El hombre del norte no es una película de acción convencional, sino una exploración brutal de la venganza, el honor y el destino. Con una dirección impecable, actuaciones intensas y una estética que combina lo real con lo mítico, Robert Eggers entrega una obra visualmente arrolladora y emocionalmente devastadora. Una epopeya que arde con la furia de los dioses y deja su marca en el alma del espectador.