
Dirigida por Dan Trachtenberg, Depredador: La presa (Prey) es una precuela del icónico universo de Predator que transporta la acción a comienzos del siglo XVIII. Protagonizada por Amber Midthunder, la película ofrece una mirada fresca y poderosa al clásico de ciencia ficción y acción, combinando la brutalidad del cazador alienígena con la valentía de una joven guerrera comanche. Estrenada en Hulu y Disney+, se ha convertido en una de las entregas más aclamadas de la franquicia.
La historia sigue a Naru (Amber Midthunder), una joven comanche hábil y decidida que anhela demostrar su valía como cazadora dentro de su tribu. Su oportunidad llega cuando una presencia misteriosa comienza a acechar las tierras donde viven: un ser de otro mundo, invisible y letal, que caza por deporte. Armada con su ingenio, su arco y su espíritu indomable, Naru deberá enfrentarse al Depredador en una batalla que pondrá a prueba su fuerza, inteligencia y coraje.
Amber Midthunder ofrece una actuación intensa y convincente, dando vida a una heroína valiente, estratégica y profundamente humana. Su interpretación equilibra la vulnerabilidad con la determinación, logrando conectar emocionalmente con el espectador. El elenco que la acompaña, integrado principalmente por actores de ascendencia indígena norteamericana, aporta autenticidad cultural y una representación respetuosa de la Nación Comanche.
Dan Trachtenberg combina el espíritu del cine de supervivencia con el suspense y la acción propios de la saga Depredador. A diferencia de las entregas anteriores, esta película apuesta por el minimalismo: una historia contenida, centrada en la caza y la naturaleza. Las secuencias de enfrentamiento están coreografiadas con precisión, alternando momentos de sigilo con explosiones de violencia controlada. El resultado es una experiencia visceral, intensa y cinematográficamente elegante.
La fotografía, a cargo de Jeff Cutter, captura la majestuosidad de los paisajes naturales con una paleta de colores terrosos y cielos abiertos. Cada plano transmite la pureza y el peligro del entorno salvaje. Los efectos visuales del Depredador son sobrios pero efectivos, mezclando lo práctico con lo digital para mantener el realismo de la criatura. La ambientación y el vestuario reflejan con fidelidad la época y la cultura comanche, enriqueciendo el contexto narrativo.
La banda sonora de Sarah Schachner combina percusiones tribales, cuerdas y silencios estratégicos que amplifican la tensión. Los rugidos del Depredador, el sonido del viento y los ecos del bosque crean un entorno sonoro inmersivo. Cada ruido se siente como una amenaza o una pista, aumentando la sensación de peligro constante. El diseño de sonido refuerza la inmersión total en la experiencia de la caza.
Depredador: La presa (2022) revitaliza la franquicia con una propuesta audaz y emocionalmente poderosa. Con su ambientación única, su protagonista carismática y una dirección que combina respeto por la saga original con una mirada moderna, se consolida como una de las mejores películas del universo Predator. Una historia de supervivencia, valentía y determinación que demuestra que el verdadero cazador no siempre es el más fuerte, sino el más inteligente.