
Dirigida por Nicholas D. Johnson y Will Merrick, Desconectada (Missing) es un thriller tecnológico que combina suspenso, emoción y creatividad narrativa. Contada íntegramente a través de pantallas de computadoras, teléfonos y cámaras de seguridad, la película utiliza el lenguaje digital de la era moderna para construir una historia intensa sobre la conexión, la pérdida y el poder de la información.
La trama sigue a June (Storm Reid), una adolescente que intenta localizar a su madre Grace (Nia Long), desaparecida durante un viaje a Colombia. Sin la ayuda de las autoridades y con solo su laptop, June se convierte en su propia investigadora, usando redes sociales, correos, cámaras y bases de datos en línea para seguir cada pista. Lo que comienza como una búsqueda desesperada se transforma en un rompecabezas lleno de giros y secretos familiares.
Storm Reid sostiene el peso de la historia con una actuación convincente y emocionalmente sólida, mostrando a una joven tan decidida como vulnerable. Nia Long aporta profundidad al papel de madre desaparecida, mientras Joaquim de Almeida y Daniel Henney completan un elenco que equilibra la tensión con momentos de humanidad y sorpresa. Cada gesto frente a una pantalla transmite más de lo que las palabras dicen.
Como sucesora espiritual de Buscando… (Searching), la película utiliza con maestría el formato de screenlife, donde toda la acción ocurre en interfaces digitales. Chats, videollamadas, correos y notificaciones se convierten en piezas narrativas que mantienen al espectador constantemente alerta. La edición, ágil y precisa, consigue transformar lo cotidiano en un campo de suspenso y descubrimiento.
Johnson y Merrick logran un equilibrio entre la emoción personal y el thriller tecnológico. El montaje nunca se siente repetitivo, y cada movimiento del cursor o cambio de ventana suma información o genera tensión. Es una muestra de cómo el cine puede reinventarse sin abandonar la narrativa clásica del misterio y la investigación.
El guion juega con las expectativas del público, revelando capas de engaño y manipulación digital que sorprenden hasta el final. La historia aborda temas como la confianza, la privacidad y la dependencia tecnológica, mostrando cómo las herramientas que usamos cada día pueden ser tanto aliadas como amenazas.
Desconectada (2023) es un ejemplo brillante del cine de suspenso contemporáneo: ingenioso, emotivo y completamente adaptado a la era digital. Con una protagonista convincente, un ritmo impecable y un formato que atrapa desde el primer minuto, demuestra que incluso detrás de una pantalla, el miedo y el amor siguen siendo profundamente humanos.