
Dirigida por Laura Murphy y estrenada en 2025 con el título original F*** Marry Kill, F*llar Casar Matar (2025) mezcla comedia, suspenso y crítica social al situar su historia en el mundo contemporáneo de las citas por aplicaciones, donde el peligro puede estar tan cerca como el próximo “match”. La protagonista, Eva Vaugh, una apasionada de los podcasts de crímenes reales, es empujada por sus amigas a entrar al mundo del *dating* digital justo cuando en la ciudad un asesino serial conocido como el “Swipe Right Killer” está aterrorizando a mujeres. Así, desde el inicio el filme explora la tensión entre la atracción moderna por la tecnología y los miedos más primitivos, generando un tono a la vez ligero y perturbador.
Eva, interpretada por Lucy Hale, celebra su cumpleaños número 30 tras la ruptura con su novio policía de ocho años. Animada por sus mejores amigas, crea un perfil en aplicaciones de citas en busca de nuevas conexiones. Sin embargo, lo que comienza como una aventura cómica de mensajes, *swipes* y primeros encuentros, se convierte en una investigación personal cuando Eva empieza a ver patrones inquietantes que podrían vincular a uno de sus pretendientes con los crímenes de la ciudad. La película convierte la búsqueda de amor en una carrera contrarreloj donde cada cita puede convertirse en una amenaza mortal.
A lo largo de la película, Eva sale con tres hombres muy diferentes: Kyle, un antiguo compañero de escuela que parece encantador pero obsesionado con el vino; Mitch, un dueño de bar con un físico imponente y curiosamente sin huellas dactilares; y Norman, un empleado de seguridad nocturna que estudia criminalística. Cada uno presenta peculiaridades que podrían hacerlo sospechoso del rol del “Swipe Right Killer”, empujando a Eva a cuestionar sus instintos y a usar su amor por el *true crime* para desenmarañar la verdad. El juego de sospechas se convierte en el motor central de la trama y alimenta tanto el humor como el suspense.
Mientras Eva y sus amigas —incluyendo a Kelly y Valerie, interpretadas por Virginia Gardner y Brooke Nevin respectivamente— descifran pistas de asesinatos a través de su podcast favorito, las citas se cruzan con el peligro real. Un detalle tan aparentemente trivial como el tamaño del calzado de los sospechosos o el hecho de que uno de ellos no tenga huellas se vuelve clave para la trama, generando una mezcla de comedia, tensión psicológica y misterio de asesinato. El filme utiliza esta estructura de *whodunit* para jugar con las expectativas del público y cuestionar hasta qué punto podemos confiar en lo que vemos en una era hiperconectada.
El punto culminante de F*llar Casar Matar (2025) llega cuando Eva descubre que la persona que parecían las pistas indicaban como asesino no es quien esperaba, y la verdadera culpable resulta tener motivaciones propias que mezclan venganza personal con malentendidos románticos. Sin revelar detalles específicos del giro final, la resolución combina tragedia y justicia de forma que reorganiza las relaciones entre los personajes, llevando a un desenlace donde la intuición y la lógica chocan para revelar la verdad.
El mensaje final de la película no se limita al entretenimiento: también reflexiona sobre la ansiedad moderna en torno al amor, la identidad y la seguridad personal en el contexto de las citas en línea. A través de la historia de Eva, *F*llar Casar Matar* ofrece tanto risas como momentos de suspense, recordando que incluso cuando buscamos conexión, hay riesgos que no siempre podemos prever. Es una mezcla de género que funciona como sátira social y thriller ligero, manteniendo al espectador intrigado hasta el último *swipe*.