
Después de haber escapado del mundo de los Minimoys, Maltazard ha logrado su objetivo más oscuro: crecer hasta convertirse en un humano de tamaño real. Ahora, con su nuevo poder, amenaza con conquistar ambos mundos: el de los humanos y el de los diminutos. Arthur, atrapado en forma Minimoy, debe encontrar la forma de revertir el caos antes de que sea demasiado tarde.
Con la ayuda de la valiente Princesa Selenia, el fiel Bétamèche y aliados humanos que apenas creen lo que están viendo, Arthur lidera la resistencia. Mientras Maltazard prepara su ejército de criaturas híbridas y máquinas destructivas, Arthur deberá usar su ingenio para detenerlo desde adentro… incluso si eso significa enfrentarse a él en un mundo que ya no le pertenece por completo.
Dirigida por Luc Besson, esta entrega combina imagen real con animación 3D como en las anteriores, pero con un tono más dinámico y de mayor escala. Arthur y la guerra de los dos mundos es el capítulo más explosivo de la trilogía, donde el ritmo se acelera y la historia se convierte en una lucha abierta por el equilibrio entre civilizaciones.
Esta vez, Arthur ya no es solo un niño con un gran corazón: es un líder. La película pone a prueba su madurez, su valentía y su capacidad de unir fuerzas entre mundos que ya no están tan separados. ¿Qué hace a un héroe cuando todo lo demás parece perdido? Esa es la verdadera pregunta detrás de cada batalla.
Arthur y la guerra de los dos mundos cierra una saga sobre amistad, identidad y la lucha entre la codicia y la armonía. Ideal para quienes comenzaron este viaje desde el jardín y quieren ver cómo termina la historia de un niño que, aunque se volvió pequeño, nunca dejó de pensar en grande.