
Mucho antes de que Blancanieves venciera a Ravenna, existía una historia que el espejo no contó. Freya, hermana de la malvada reina, sufre una traición que la transforma en la Reina de Hielo. Dolida, construye un reino gélido donde el amor está prohibido. Allí, entrena a un ejército de cazadores, entre ellos Eric y Sara, quienes rompen su regla más importante: enamorarse.
Cuando el espejo mágico reaparece, las fuerzas del bien y el mal se vuelven a cruzar. Ravenna regresa más poderosa que nunca, y Freya debe decidir si proteger su reino… o unirse a su hermana. Mientras tanto, Eric y Sara luchan no solo por sobrevivir, sino por mantener viva la esperanza en un mundo que ha perdido la fe en el amor.
Dirigida por Cedric Nicolas-Troyan, esta secuela/precuela visualmente deslumbrante cuenta con un elenco estelar: Chris Hemsworth como Eric, Jessica Chastain como Sara, Charlize Theron retomando su papel como Ravenna, y Emily Blunt como la nueva Reina de Hielo. La película ofrece batallas mágicas, escenarios de cuento y vestuarios espectaculares.
Aunque la estética y el diseño de producción son impresionantes, la historia no logra la misma profundidad emocional que su predecesora. Las motivaciones de algunos personajes se sienten apresuradas, y el ritmo decae en el segundo acto. Sin embargo, los momentos entre Eric y Sara aportan humanidad en medio de tanta magia.
El cazador y la reina de hielo no reinventa el género, pero ofrece una experiencia visual entretenida para fans de la fantasía oscura. Es un cuento sobre el dolor, el perdón y el poder del amor… incluso en los corazones más fríos.