
Dirigida por Hiromasa Yonebayashi, El recuerdo de Marnie (Omoide no Mānī / When Marnie Was There) es una película de Studio Ghibli estrenada en 2014 que mezcla drama, misterio y elementos sobrenaturales en una historia profundamente emotiva. Basada en la novela homónima de Joan G. Robinson, esta obra se distingue por su tono introspectivo y su delicada exploración de temas como la soledad, la identidad y el poder del recuerdo.
La protagonista es Anna Sasaki, una adolescente solitaria que, debido a problemas de salud, es enviada a pasar el verano con sus tíos en una tranquila aldea costera. Allí descubre una misteriosa mansión abandonada y conoce a Marnie, una niña rubia que parece vivir en otro tiempo. Entre ambas surge una profunda amistad llena de momentos mágicos, confidencias y secretos, que poco a poco revelan una conexión más profunda de lo que Anna imagina.
Sara Takatsuki interpreta a Anna, transmitiendo de forma conmovedora su tristeza, inseguridad y evolución personal. Kasumi Arimura da voz a Marnie, irradiando calidez y misterio a la vez. Los tíos, los vecinos y los habitantes de la aldea aportan un entorno acogedor que contrasta con el mundo interior de Anna, dándole a la historia un tono íntimo y humano.
La animación de Studio Ghibli recrea paisajes costeros con un detalle impresionante: cielos amplios, mar en calma, campos verdes y una atmósfera luminosa que transmite paz y nostalgia. La mansión de Marnie es especialmente destacable, con su diseño clásico y envolvente que refuerza el misterio sobrenatural. Cada escena está cuidadosamente compuesta para reflejar el estado emocional de Anna.
La banda sonora, compuesta por Takatsugu Muramatsu, acompaña con sutileza los momentos clave de la historia. Melodías al piano y arreglos orquestales sencillos refuerzan la sensación de ensueño y melancolía que atraviesa toda la película. El tema final, “Fine on the Outside” de Priscilla Ahn, es especialmente recordado por su tono íntimo y emotivo.
El recuerdo de Marnie (2014) es una película delicada y profundamente humana que combina misterio y emoción en un entorno sereno y nostálgico. Con personajes sensibles, animación exquisita y una narrativa introspectiva, es una de las obras más emotivas de Studio Ghibli, y marcó el cierre de una etapa para el estudio antes de su pausa temporal en la producción de largometrajes.