
Dirigida por David S. Goyer, Invisible (título original: The Invisible) es un thriller sobrenatural y drama adolescente estrenado en 2007. Basada en la novela sueca de Mats Wahl y en la película homónima sueca de 2002 (Den Osynlige), esta versión norteamericana combina misterio, suspenso y elementos paranormales, con un enfoque más emocional que terrorífico. Protagonizada por Justin Chatwin y Margarita Levieva, explora temas de incomunicación, culpa y redención en un contexto juvenil.
La historia sigue a Nick Powell (Justin Chatwin), un estudiante ejemplar con un futuro brillante que sueña con irse de su ciudad. Sin embargo, un encuentro fortuito con Annie (Margarita Levieva), una joven problemática, desencadena un violento ataque que deja a Nick en un estado misterioso: su cuerpo está inconsciente, pero su espíritu vaga por el mundo como un “invisible”, incapaz de comunicarse con los vivos. Con el tiempo limitado, Nick debe encontrar la manera de guiar a otros hacia su cuerpo antes de que sea demasiado tarde.
Justin Chatwin aporta sensibilidad y carisma al rol de Nick, equilibrando desesperación y determinación. Margarita Levieva ofrece una interpretación intensa y compleja como Annie, una joven marcada por la violencia y la incomprensión. La dinámica entre ambos es el núcleo emocional de la película. Entre los secundarios destacan Marcia Gay Harden como la madre exigente de Nick y Chris Marquette como su mejor amigo.
David S. Goyer, conocido por su trabajo en guiones de superhéroes y thrillers, dirige con un estilo sobrio, utilizando tonos fríos y paisajes urbanos para reflejar el aislamiento de los personajes. La narrativa alterna entre la investigación policial, el drama familiar y la lucha interna de Nick por ser escuchado. Aunque no se apoya en sustos tradicionales, mantiene una tensión constante a través de la cuenta regresiva y el dilema moral de los protagonistas.
La banda sonora mezcla temas alternativos y ambientales que refuerzan el tono emocional de la historia. Artistas como Snow Patrol, Death Cab for Cutie y otras bandas de la época aportan un aire melancólico muy propio del cine juvenil de mediados de los 2000, acompañando los momentos más introspectivos y dramáticos.
Invisible (2007) es una mezcla interesante de drama adolescente y misterio sobrenatural. Aunque no alcanzó gran éxito en taquilla, destaca por su tono melancólico, su enfoque más emocional que terrorífico y la química entre sus protagonistas. Es una propuesta diferente dentro del género, ideal para quienes disfrutan de historias de segundas oportunidades y dilemas entre la vida y la muerte.