
Dirigida por Travis Knight y producida por Laika Studios, Kubo y la búsqueda samurái es una película de animación en stop-motion que combina mitología japonesa, emoción profunda y una estética visual deslumbrante. Kubo, un niño con el poder de dar vida al origami con su música, vive tranquilamente cuidando de su madre… hasta que los espíritus del pasado regresan para cazarlo.
Kubo se ve forzado a huir cuando dos brujas aterradoras lo atacan, buscando su ojo restante —el otro fue robado por su abuelo, el Rey Luna. Acompañado por Mono y Escarabajo, dos aliados mágicos con pasados misteriosos, inicia una misión para encontrar la armadura de su padre: un legendario guerrero samurái. En el camino, Kubo descubrirá que la verdad sobre su familia es más compleja… y dolorosa.
La película es una joya visual. Cada escena fue construida cuadro por cuadro, dando como resultado una estética única, poética y cargada de simbolismo. El uso de papel, sombras y luz evoca el teatro japonés, mientras que la banda sonora, compuesta por Dario Marianelli, acompaña con sutileza y emoción cada giro de la historia.
El elenco de voces incluye a Charlize Theron como Mono, Matthew McConaughey como Escarabajo, y Art Parkinson como Kubo. Cada personaje tiene una carga emocional importante, y la historia se centra en temas profundos como la pérdida, la memoria, el duelo y la valentía.
Kubo y la búsqueda samurái no es solo una película de aventuras: es una meditación sobre el poder de contar historias, el vínculo con nuestros antepasados y la fuerza de la compasión. Con una animación exquisita y una narrativa que toca el corazón, es ideal para quienes buscan algo más profundo que una simple aventura animada.