
Kevin McCallister ha vuelto… aunque con un nuevo rostro. En esta cuarta entrega, Kevin se enfrenta a un escenario muy diferente: sus padres están separados, y él es invitado a pasar Navidad en la enorme mansión tecnológica del nuevo novio de su madre. Todo parece ir bien, hasta que reaparece Marv —sí, el mismo ladrón de siempre— ahora con una nueva compañera y un plan más ambicioso que nunca: secuestrar a un príncipe que se hospedará en la casa.
La casa, equipada con sistemas inteligentes, parece invencible… pero también vulnerable en manos equivocadas. Kevin, con su ingenio intacto, transforma gadgets y habitaciones elegantes en su propio campo de batalla. Y aunque esta vez no está solo en casa, sí será el único capaz de detener a los ladrones, proteger al pequeño príncipe y, de paso, lidiar con las emociones que vienen con una familia rota.
Dirigida por Rod Daniel y lanzada como película para TV, Mi pobre angelito 4 intenta recuperar el espíritu original, reintroduciendo personajes conocidos pero con nuevos actores. Aunque el cambio no convenció a todos los fans, ofrece una nueva mirada sobre Kevin y el caos navideño con un toque moderno y tecnológico para su época.
Más allá de las bromas, la película muestra a un Kevin un poco más grande, lidiando con la separación de sus padres, el deseo de pertenecer y el miedo a perder su lugar. En medio del caos navideño, encuentra una forma de proteger lo que ama y recordar que el hogar también puede reconstruirse, aunque las cosas no sean como antes.
Mi pobre angelito 4 es una historia sobre adaptarse a los cambios, mantener la astucia y recordar que el espíritu navideño no se apaga con un control remoto. Ideal para quienes quieren ver otra aventura de Kevin —versión reimaginada— con un toque de nostalgia y mucha tecnología… casera.