
Dirigida por Ridley Scott, La casa Gucci (House of Gucci) es un drama basado en la increíble historia real de la familia detrás de una de las marcas más icónicas del mundo de la moda. Con un elenco estelar encabezado por Lady Gaga y Adam Driver, la película combina glamour, excesos y tragedia en una historia de amor, codicia y poder que sacudió a la industria del lujo.
La historia sigue a Patrizia Reggiani (Lady Gaga), una mujer de origen humilde que se enamora de Maurizio Gucci (Adam Driver), heredero de la prestigiosa firma italiana. Lo que comienza como un romance apasionado pronto se transforma en una lucha por el control del imperio familiar. Entre traiciones, conspiraciones y una guerra de egos, Patrizia pasa de ser una esposa devota a convertirse en una figura obsesionada con el poder y la venganza.
Lady Gaga brilla con una actuación intensa y magnética, interpretando a Patrizia con una mezcla de elegancia, ambición y vulnerabilidad. Su transformación física y emocional es hipnótica. Adam Driver ofrece una interpretación sobria y contenida de Maurizio, contrastando perfectamente con la energía arrolladora de Gaga. A su lado, Jared Leto, Al Pacino y Jeremy Irons aportan extravagancia, humor y dramatismo en dosis exactas, creando un retrato coral de una familia consumida por su propio nombre.
Ridley Scott mezcla el drama familiar con el tono de una tragedia moderna envuelta en lentejuelas. La dirección es elegante, con una puesta en escena que exuda opulencia en cada detalle: desde los desfiles de moda hasta los pasillos de mármol y los trajes meticulosamente diseñados. La fotografía resalta los contrastes entre el brillo superficial del poder y la oscuridad moral que lo corroe. Cada plano está impregnado de estilo, ironía y decadencia.
La película retrata cómo la ambición puede devorar todo lo que toca. Patrizia encarna la tentación del lujo y la caída moral que lo acompaña, mientras la familia Gucci representa el fin de una era donde el apellido lo era todo. La historia combina momentos de sátira con escenas de tensión emocional, logrando un equilibrio entre el espectáculo y la tragedia personal.
La casa Gucci (2021) es una película elegante, provocadora y visualmente deslumbrante. Con actuaciones memorables y una dirección que mezcla drama y humor negro, ofrece una mirada fascinante al costo de la ambición y el precio del poder. Lady Gaga confirma su talento actoral con una interpretación icónica, mientras Ridley Scott entrega un retrato tan glamuroso como trágico. Un desfile de lujo, pasión y crimen al más puro estilo italiano.