
Dirigida por Robin Bain, La última exorcista (The Last Exorcist) es un thriller sobrenatural estadounidense estrenado en 2020 que mezcla elementos de terror religioso y drama familiar. La película explora la lucha entre el bien y el mal a través de una historia centrada en el legado de un exorcista y el enfrentamiento de fuerzas demoníacas.
La historia sigue a Jo (Rachael Lillis) y Maddie (Terri Ivens), dos hermanas que deben enfrentar una poderosa presencia demoníaca tras la muerte de su padre, un reconocido exorcista. Jo, que ha vivido alejada de la fe, se ve obligada a tomar el lugar de su padre y luchar contra el mal que amenaza a su familia. A medida que los ataques sobrenaturales se intensifican, descubre oscuros secretos sobre su linaje y el verdadero alcance de la amenaza.
Rachael Lillis interpreta a Jo con un enfoque intenso, mostrando su evolución de una mujer escéptica a una combatiente decidida. Terri Ivens aporta dramatismo al papel de Maddie, atrapada entre el miedo y la esperanza. Los personajes secundarios, incluidos sacerdotes y figuras religiosas, ayudan a construir la tensión espiritual de la historia.
La película utiliza escenarios cerrados —casas, iglesias y hospitales— para generar una atmósfera opresiva. La iluminación tenue, los encuadres cerrados y el uso de efectos prácticos refuerzan el tono de terror clásico, centrado más en la sugestión que en los sustos repentinos.
La banda sonora combina acordes corales, campanas y sonidos inquietantes que intensifican las escenas de posesión y exorcismo. La música se integra con los efectos de sonido para crear un ambiente tenso y sobrenatural constante.
La última exorcista (2020) es un thriller sobrenatural que mezcla el terror religioso con el drama familiar. Aunque no reinventa el género de exorcismos, ofrece una historia oscura y directa, ideal para los fanáticos del terror espiritual y las luchas entre fe y oscuridad.