
Kuzco lo tiene todo: poder, riqueza y una autoestima del tamaño de su imperio. Pero cuando decide destruir la aldea de un campesino para construirse una piscina, las cosas no salen como espera. Traicionado por su ex asesora Yzma y su torpe secuaz Kronk, Kuzco es convertido en… una llama. Y ahí empieza la verdadera locura.
Para recuperar su trono (y su forma humana), Kuzco se ve obligado a aliarse con Pacha, un campesino bueno, paciente… y con mucho que enseñarle. Juntos atraviesan selvas, puentes colgantes, ataques de jaguares y un sinfín de enredos que poco a poco transforman al emperador más insoportable en alguien un poquito menos… emperador.
Dirigida por Mark Dindal, Las locuras del Emperador se aleja de las típicas fórmulas de Disney y apuesta por la comedia pura: chistes visuales, rupturas de cuarta pared y un ritmo ágil que no da respiro. Pero entre tanto humor absurdo, también hay una historia sincera sobre humildad, cambio y amistad verdadera.
Con música de Sting y una intro narrada por Tom Jones, la película abraza el caos con estilo. No es un musical tradicional, pero cada nota complementa la vibra excéntrica del mundo de Kuzco, desde el palacio hasta la última chocita en la montaña.
Las locuras del Emperador es una de las películas más divertidas (y menos convencionales) del catálogo de Disney. Una oda al humor absurdo, al crecimiento involuntario y a esas amistades que llegan sin pedir permiso… pero se quedan para siempre. 🦙🎉